De todas las enfermedades presentes en nuestra sociedad y estudiadas a día de hoy, podemos afirmar en palabras de Malvezzi, Bertuccio (1) que el cáncer de próstata (CP) se encuentra entre las 10 enfermedades que causan un mayor número de muertes en todo el mundo.
Conocemos que el ejercicio tiene un papel importante en la regulación de biomarcadores del CP. Sin embargo, en esta entrada queremos adentrarnos a conocer qué importancia tiene el ejercicio físico en personas que tienen CP y sarcopenia. Sabemos que la sarcopenia tiene efectos negativos sobre las personas con cáncer, entonces ¿Cómo podemos evitarlo?
La sarcopenia se define de forma general como una pérdida de masa muscular y de funcionalidad relacionada con el avance de la edad (2) . Esta pérdida puede provocar una reducción de la fuerza muscular, de la capacidad física, de la calidad de vida, del fitness cardiovascular, de la propiocepción (más caídas) y puede suponer incluso la muerte. Además, sabemos que las personas con CP padecen un gran número de las complicaciones anteriormente mencionadas. Analizar la sarcopenia presenta una dificultad añadida puesto que su definición, a día de hoy, sigue siendo incierta.
En el estudio de objeto de este blog (3) se define la sarcopenia (en base a estudios previos de Baumgartner RN y col.) como un descenso en el índice de sarcopenia = masa osea apendicular (kg)altura (m2) (4). Según esta ecuación una persona que tiene un índice < 7. 26 kg/m2 (medida con densitometría dual de rayos X) tiene sarcopenia.
Dawson JK, y col. (3) analizaron qué relación poseía el ejercicio con personas con CP y con sarcopenia. Se realizó un estudio controlado aleatorizado donde se formaron dos grupos. Uno de ellos realizaba ejercicio (n=16) y otro no lo realizaba (n=19). El grupo de ejercicio realizaba un entrenamiento de fuerza durante 12 semanas, 3 días a la semana acompañados de un entrenador cualificado. El entrenamiento poseía los ejercicios que se recogen en la tabla 1 y que siguieron una progresión específica.
Semanas 1–2: 60% 1RM, 15 reps.; Semanas 3–4: 65–67% 1RM, 15–12 reps.; Semanas 5–6: 70% 1RM, 12–10 reps.; Semanas 7–8: 75% 1RM, 10–8 reps.; Semanas 9–10: 80% 1RM, 10–8 reps.; Semanas 11–12: 83% 1RM, 8 reps.

Selección de ejercicios de fuerza.
Finalmente se analizaron los resultados y se vio que tras 12 semanas de intervención con entrenamiento de fuerza, cuando comparamos ambos grupos, el grupo que entrenaba aumentó el índice sarcopénico en un 3.6% y el grupo control tan sólo un 0.1% con una significación p=0.02. Esto quiere decir, que aquellas personas que entrenaron tenían una mayor masa muscular después de la intervención si los comparamos con aquellos que no entraron. De la misma forma el % de personas que tenía sarcopenia al inicio de la intervención en el grupo que entrenó (38.5%) bajó después de la intervención (15.4%). Y ocurre de manera contraria en el grupo que no entrenó (47.4% vs 52.6%)
Tras analizar estos resultados podríamos concluir que hacer ejercicio va a prevenir posibles efectos adversos en personas con CP que tengan sarcopenia. Sin embargo, debemos tener en cuenta que en este estudio la sarcopenia se define según los estudios Baumgartner RN y col. sin tener en consideración la definición de la “European Working Group on Sarcopenia in Older People (EWGSOP)” mucho más empleada y extendida en la literatura.
La sarcopenia es una patología muy difícil de abordar y debemos ser cautelosos a la hora de analizar los estudios que se encuentran actualmente en la literatura. Sin embargo, no podemos negar la relación clara y concisa que existe entre la práctica de ejercicio físico y el aumento de la masa muscular. Esta relación nos lleva a pensar que una intervención con ejercicio mejorará los niveles de masa muscular y por ende, los niveles de sarcopenia en población con cáncer de próstata
Unai Perez de Arrilucea Le Floc’h
EQUIPO IPEFC
Referencias
1. Malvezzi M, Bertuccio P, Levi F, La Vecchia C, Negri E. European cáncer mortality predictions for the year 2013. Annals of Oncology. 2013;24(3):792-800.
2. SJ Peterson, M Mozer. Differentiating sarcopenia and cachexia among patients with cancer. Nutrition in Clinical Practice. Wiley Online Library. 2017(1):30-39
3. Dawson JK, Dorff TB, Schroeder ET, Lane CJ, Gross ME, Dieli-Conwright CM. Impact of resistance training on body composition and metabolic syndrome variables during androgen deprivation therapy for prostate cáncer: a pilot randomized controlled trial. BMC cáncer. 2018;18(1):368.
4. Baumgartner RN, Koehler KM, Gallagher D, Romero L, Heymsfield SB, Ross RR, et al. Epidemiology of sarcopenia among the elderly in New Mexico. American journal of epidemiology. 1998;147(8):755-63.